El sistema universitario argentino se constituye en base a tres funciones sustantivas; la docencia, la investigación y la extensión; ésta última se caracteriza por ser la que promueve, fortalece y sostiene el vínculo entre la universidad y la comunidad en la que se encuentra inserta. Por su parte, la tríada docencia, investigación y extensión posibilitan un visión de la integralidad desde la que se enmarcan gran parte de las universidades de nuestro país, y a la que resulta menester sumarse, implementando acciones y proyectos que promuevan una lógica interdisciplinar y multidisciplinar por su aspecto medular en las formaciones profesionales y la creación de nuevos conocimientos.
En su condición de práctica colectiva y dialógica, la tarea extensionista construye puentes que permiten relacionar a actores comunitarios, institucionales como universitarios, portadores de saberes, capacidades y limitaciones, en la búsqueda de respuestas y soluciones a problemáticas sociales concretas.
Por la naturaleza dinámica que origina la dialéctica de las experiencias que se desarrollan y adquieren sentido en territorio, esas respuestas y soluciones requieren ser constantemente interrogadas desde una perspectiva crítica. Y en este sentido se orienta el Programa “Puntos Extensivos”, porque su objetivo fundamental es fortalecer el compromiso de la universidad con la comunidad, entendiendo que es al menos un modo de construir/deconstruir actividades y procesos educativos, transformadores, en los que educadores y educandos enseñan y aprenden, recíprocamente, produciendo conocimientos nuevos, más complejos y enriquecedores.